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Higiene Y Belleza

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Respondemos a tus dudas sobre la higiene de tu gato. Si has observado a gatos alguna vez ya te habrás dado cuenta de lo extremadamente limpios que son y que invierten gran parte de su tiempo acicalándose (¡hasta 4 horas diarias!). Pero en ocasiones excepcionales deberás darles algún baño así que te explicamos cómo hacerlo. También te recomendamos mantener una rutina en su peinado para evitar que se trague gran parte de su pelo muerto.

En Garden Center Sopela, a 12 minutos de Leioa, somos especialistas en los cuidados de los animales. Así que si tienes dudas al respecto pásate por nuestra tienda de animales y te aconsejaremos los mejores productos y las rutinas necesarias para que tu gato esté sano y limpio.

Cómo bañar a un gato: champús para gatos

Cómo te decíamos, los gatos mantienen una rutina diaria de limpieza, por lo que no es habitual tener que darles un baño. Su lengua es áspera, precisamente para poder retirar la suciedad adherida a su pelaje. De hecho, si observas que tu gato, viviendo en el interior de casa y sin salir al exterior, de repente está sucio puede ser un problema de salud. Ya que cuando un gato está enfermo descuida su higiene. Así que acude al veterinario para comprobar su estado.

Tendrás que bañarle si se ha manchado de manera exagerada o con alguna sustancia que haya que retirar de forma inmediata (aceite, pintura, barro…) También en el caso de que tenga pulgas tendrás que lavarlo como parte del tratamiento. Los métodos antiparasitarios resultan mucho más efectivos si previamente le das un baño con un champú antiparasitario. También en el caso de alergias o alguna infección en la piel (como la tiña, por ejemplo) es posible que tu veterinario te recomiende el baño.

El mito de que a los gatos no les gusta nada bañarse se cumple a medias. No sucede con todos, pero sí que es cierto que la falta de control de la situación a muchos no les gusta nada. Lo de mojarse enteros no va en su naturaleza, así que si es el caso de tu minino no te preocupes porque para él hay champú en seco.

Como ya sabes los gatos son animales rutinarios, así que si lo acostumbras desde cachorro a los baños mucho mejor. Antes de su primer baño debe completar el calendario de vacunas y desparasitaciones, así que hasta los 3 o 4 meses de vida nada de baños. También debes acostumbrarle al secador. Recuerda que los ruidos fuertes son molestos para ellos porque tienen un oído mucho más sensible que el nuestro. Puedes ir poco a poco. Dejando que se acerque al baño cuando tú te duches, por ejemplo. O cuando te seques el pelo con un secador, si se acerca, premiarle. Para que lo asocie con cosas positivas y vea que no hay por qué tener miedo. También que se vaya acercando a la bañera, poco a poco. No les gusta nada lo resbaladiza que es, así que es una buena idea ponerle alguna alfombrilla antideslizante o en su defecto una toalla mojada. A un gato adulto también puedes acostumbrarle a los baños, pero resultará más complicado. Ve poco a poco, añade refuerzos positivos, e incluso mete en la bañera alguno de sus juguetes favoritos para que lo asocie a algo placentero y divertido.

Recuerda que le debes transmitir calma a tu gato para que no se estrese. Así que si tú estás estresado mejor déjalo para otro momento porque será un momento desagradable para ambos, y no es necesario. Además para el próximo baño tu gato será aún más reticente. Trátalo con mucho cariño, dale mimos y nada de riñas ni sonidos fuertes o bruscos. Puedes evitar el sonido del grifo, si ves que le molesta, llenado previamente cubos u otro recipiente con agua. Una buena idea es dejar todo lo que vayas a necesitar a mano, para no dejar desatendido a tu gato. También cepillarle antes, ya que así eliminarás el pelo muerto y al quitar los nudos previos no crearás tantos al bañarlo y el champú llegará mejor a todos los rincones. Ten en cuenta que finalizar todo el proceso del baño te llevará bastante tiempo (alrededor de una hora) Así que tenlo en cuenta para realizar el baño sin prisas ni estrés adicional.

El agua debe estar tibia (entre 37 y 38 grados) y ve poco a poco. No le mojes de golpe, porque no lo recibirá con agrado. Evita mojarle la cara y tampoco la tripa si a tu gato no le gusta que se la toques. Comienza mojándole el lomo, luego las patas y por último la nuca y, si se deja, la barriga. Utiliza siempre un champú para gatos específico, su pH es diferente al nuestro así que nada de usar el champú de humanos ya que podemos dañar su piel. Si tu minino tiene el pelo largo ten cuidado a la hora de enjabonar, para evitar provocarle enredones. Y por supuesto aclararlo a fondo para evitar dejar restos de jabón.

Una vez terminado el baño toca secarlo en profundidad. Para ello usa primero una toalla y quita todo el exceso de agua. Luego le toca paso al secador, sobre todo si es invierno y hace frío. Pero no lo pongas al máximo de potencia ni al máximo de calor. Lo último que queremos es asustarlo o quemarlo. Evita la cara (ojos y hocico) y el interior de las orejas. Así que a potencia mínima y aire templado. Sigue con refuerzos positivos para que el secador no lo asocie a nada negativo. Pero asegúrate que esté bien seco para evitar los resfriados. Una buena práctica es peinarlo después de nuevo para quitarle todos los enredones que se hayan podido crear durante el proceso.

En cuanto a la frecuencia del baño dependerá de factores como si es de pelo corto o de pelo largo (que se manchará más) también si vive solo en el interior de casa o si sale al exterior. Si se limpia él mismo o ha dejado de hacerlo por cualquier motivo. Si tu gato es adulto y le acabas de vacunar mejor esperar unos días a bañarlo, ya que pueden suponer situaciones de estrés para él, y es mejor espaciar ambos eventos. Pero depende del carácter de tu gato. Y siempre existen excepciones. Por ejemplo los gatos sphynx (o gato esfinge) necesitarán un baño mensual, ya que, al contrario de lo que pueda parecer, estos gatos tienen la piel grasa y son propensos a acumular suciedad. Como ves la frecuencia cambiará pero no debe ser muy a menudo. Una vez al mes como mucho, porque con más lavados podemos afectar a la salud de su piel y pelo.

Para aquellos gatos que detestan el agua, y no has conseguido hacerles cambiar de opinión, puedes utilizar champú en seco para gatos o toallitas húmedas. En el caso del champú en seco, gracias a su textura espumosa, es muy fácil de aplicar. Recuerda no enjabonar ni la cara ni los genitales. Se deja actuar un par de minutos, y para retirarlo con un sencillo cepillado es suficiente, llevándonos en el cepillo tanto la suciedad como el champú. Por lo que es conveniente que después laves el cepillo para eliminar todos los restos. Y las toallitas húmedas para gatos son ideales para alguna mancha puntual en su pelaje, pero también para limpiarle la cara, algo que habíamos evitado en el momento del baño. Las toallitas para bebé no son aptas por el mismo motivo por el que tampoco se debe usar el champú de personas: nuestro pH es diferente.

Para limpiarle las orejas existen productos específicos: limpiadores de oídos para gatos. Que te servirán para realizar una higiene correcta y en profundidad. También limpiadores de cuidado ocular para gatos y cepillos de dientes y pastas dentales para el cuidado de la boca de tu minino. Las colonias para gatos pueden ser un plus final tras su baño. Hay multitud de olores que os gustarán tanto a tu gato como a ti. Puedes pasarte por nuestra tienda de animales, a 20 minutos de Bilbao, para oler las distintas fragancias y encontrar la que os guste más.

Peinar a tu gato: cepillos y peines

Es muy necesario el cepillado de tu gato. No es solo una cuestión de belleza también lo es de salud. Como ya sabes tu gato se acicala solo y se lamerá mil veces al día su pelaje para estar limpio y aseado. Pero esto implica que, sin querer, se termine tragando un montón de pelos creando bolas de pelo que, en el mejor de los casos, eliminará mediante toses o vómitos. Para evitarlo, lo ideal es que eliminemos casi todo su pelo muerto mediante el cepillado. Como mínimo una vez a la semana, pero si te es posible mejor tres veces a la semana. Incluso más en épocas de muda de pelo como primavera y otoño.

Cepillos y peines para gatos de pelo corto

Para un gato de pelo corto el mantenimiento de su pelaje será más sencillo, pero igual de necesario e importante. Para evitar hacerles daño lo ideal es un cepillo de púas cortas, mejor con la punta redondeada y de plástico. Lo combinaremos con una manopla o un cepillo de plástico para gatos que será el que retire los pelos muertos. Es decir con uno desenredamos y con el otro quitamos los pelos caídos. Para conseguir acceder a todos los pelos muertos puedes ahuecarle un poco el pelo con la mano, y también peinarle a contrapelo. Por supuesto no debes dejar ninguna parte sin cepillar: lomo, patas y barriga incluida. Recuerda terminar peinándole en el sentido del pelo para no dejárselo alborotado. Todo este proceso debes hacerlo cuando estéis relajados e intercalando con mimos e incluso premios. Si no sabes si le está gustando o no a tu gato un pista: si ronronea es una gran señal. Además reforzará vuestro vínculo y tu casa estará más limpia.

Cepillos y peines para gatos de pelo largo

Para los gatos de pelo largo tendrás que aumentar la frecuencia de peinado por varios motivos:

- El pelo largo tiende a enredarse
- Las bolas de pelo que se les forman son más grandes
- Se les cae pelo todo el año

Y nos tememos que sí, es más laborioso el cepillado que los gatos de pelo corto y que lo ideal es que sea una rutina diaria, pero no te preocupes porque con 5-10 minutos será suficiente. Y si observas que tiene mucho enredones puedes añadir a la rutina del baño un acondicionador para gatos o usar cepillos cortanudos. El peine metálico es ideal para quitar los enredones, pero al ser rígido debes tener cuidado para no hacerle daño a tu gato si ejerces demasiada presión con él. Los cepillos de púas largas serán los adecuados para poder acceder a la totalidad de la largura del pelo. Para un correcto cepillado primero usaremos el peine metálico para desenredar y después el cepillo de púas largas para retirar todo el pelo muerto.


Si tienes alguna duda de cómo acicalar a tu gato puedes venir a nuestra tienda de animales, a 20 minutos de Barakaldo y te explicaremos los mejores trucos para que el baño y el cepillado de tu gato sea un momento agradable para ambos. Lo puedes convertir en el momento perfecto para reforzar vuestro vínculo.

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