Cottage Garden

¡Crea tu propio ‘cottage garden’ con macetas!

Ese estilo cottage garden que enamora con su mezcla de flores de aspecto silvestre y su aire informal también se puede conseguir en una terraza o balcón. ¿Por qué no? Se trata de escoger las plantas adecuadas, plantarlas en tiestos individuales o combinados, y colocarlas en batiburrillo. De paso crearás un paraíso para abejas y mariposas.

¡Cuantas más flores y cuanto más diversas, mejor! Flores de plantas de aspecto silvestre, modestas y resistentes. Este es el espírtu de los cottage gardens, en origen humildes jardines de la campiña inglesa cuya vocación primera era proporcionar néctar a las abejas, imprescindibles polinizadoras de los huertos. Jardines sin estructura, informales, llenos de encanto natural, con plantaciones densas, a menudo en feliz convivencia con hierbas aromáticas, hortalizas y frutales.

Se trata de escoger las plantas de flor adecuadas, que en este caso no solo han de imprimir un aire campestre sino también adaptarse perfectamente a la vida en maceta.

¿Por qué no llevar ese feeling de jardín de campo a un patio o una terraza en medio de la ciudad? Como siempre, se trata de escoger las especies adecuadas, que en este caso no solo han de imprimir un aire campestre sino también adaptarse perfectamente a la vida en maceta. La colección Bee friends del Flower Council of Holland incluye cinco plantas de jardín —sus Protagonistas de julio— que cumplen esos requisitos: milenrama (Achillea millefolium), malvarrosa (Alcea rosea), agastache (Agastache foeniculum), anémonas japonesas (Anemone x hybrida) Astrantia. Mezclan maravillosamente entre sí, están bien adaptadas al clima mediterráneo y además son grandes amigas de las abejas (lee sobre su importancia en la columna de la izquierda), abejorros y mariposas.

Con estas plantas tendrás flores de manera continuada desde el verano hasta bien entrado el otoño. No te olvides de eliminar las que se vayan marchitando para incentivar la refloración. Las cinco son de fácil cultivo y muy resistentes a las plagas y hongos.

 

El cultivo en contenedores

Es importante que las macetas y jardineras cuenten con agujero de drenaje y una capa de gravilla en el fondo. Se pueden situar a pleno sol o en sombra parcial. Aunque muchas de estas plantas son rústicas (soportan el frío y las heladas) y toleran la sequía, recuerda que en el cultivo en contenedor necesitarán riego regular moderado (sin encharcar). Les puedes aportar abono orgánico (compost, humus de lombriz) en otoño o invierno, y mineral para plantas de flor en primavera.

Styling Elize Eveleens

 

CINCO PLANTAS PARA EVOCAR EL CAMPO

• Agastache (Agastache foeniculum)

Su abundante follaje desprende un delicioso aroma a anís y menta, al igual que sus espigas florales violetas, formadas por diminutas florecillas labiadas (como las del romero). En el cultivar ‘Alabaster’ las inflorescencias son blancas con matices dorados. Crece rápidamente hasta alcanzar entre 0,60 y un metro de altura. Aunque adora el sol, también vive bien en sombra. Produce muchas semillas.

 

• Astrantia major

Esta vivaz, habitual en los jardines de Piet Oudolf, produce pequeñas umbelas de una gran belleza: un ramillete de minúsculas flores rodeadas de bracteolas con aspecto de pétalos. Suelen ser blanquecinas o levemente rosadas, aunque los cultivares han expandido la gama tonal.

Styling Elize Eveleens - Klimprodukties

En tiestos Zinc envejecido

 

• Anémonas japonesas (Anemone x hybrida)

A partir de agosto y hasta que acaban vencidas por el frío del otoño, estas anémonas no dejan de emitir delicadas flores blancas o rosa pálido. Pueden ser simples o semidobles y surgen al cabo de largos tallos de 0,5 a 2 metros de altura. Son famosos los híbridos ‘Honorine Jobert’, de copiosa floración blanca, y ‘September Charm’ y ‘Köningin Charlotte’, de flores rosadas semidobles.

 

• Milenrama (Achillea millefolium)

Destaca por su follaje plumoso y sus gráciles varas florales que acaban en corimbos planos formados por pequeñísimos capítulos. Crece silvestre en buena parte de la Península, por eso tolera bien el calor, el frío y la sequedad ambiental. La especie ha dado pie a variedades de flores rojo oscuro, rosa intenso, magenta, rosa malva… colores que en algunas va cambiando con el paso de los días.

 

• Malvarrosa o malva real (Alcea rosea)

Sus flores simples, semidobles o dobles, de entre seis y diez centímetros de diámetro y colores de lo más diversos, incluido un rojo oscuro casi negro (‘Nigra’), aparecen formando largas espigas que pueden alcanzar entre 0,50 y dos metros de altura. Es una planta perfecta para aportar verticalidad a las composiciones. Esta vivaz de vida corta (unos cinco años), semilla abundantemente.

Corales y marinos

Agenda de cuidados y consejos de las plantas, jardín & terraza, huerta en Julio

“Por San Fermín el calor no tiene fin”, dice el refrán. La última quincena de julio y la primera de agosto suponen un claro desafío a la resistencia de las plantas. El riego es crucial. Las noches suponen un alivio para el jardín y la terraza… ¡y el momento ideal para disfrutarlos!

TAREAS GENERALES DEL MES

✓ El riego es de máxima importancia en julio. Utiliza aspersión para el césped; goteo para los arbustos, anuales y vivaces, setos y árboles, y regadera o inmersión (según) para algunas plantas de interior.

✓ Abonar las plantas de flor. Están a pleno rendimiento, de modo que necesitarán un abonado rico en fósforo y potasio y bajo en nitrógeno.

✓ Las plagas y hongos, a raya. El control de plagas y enfermedades sigue siendo clave. En lo posible, utiliza plaguicidas sistémicos y fungicidas de amplio espectro.

✓ Eliminar las malas hierbas. La escarda de malas hierbas no se debe descuidar. En algunos casos convendrá usar un herbicida; pide consejo en tu centro de jardinería.

Árboles, arbustos y trepadoras

Aclara arbustos y trepadoras

Libera los árboles, arbustos y trepadoras de las ramas secas, débiles o enmarañadas. Las tijeras deben estar bien limpias y afiladas para no provocar desgarros. Escoge la herramienta adecuada según el grosor de las ramas.

Obtén esquejes

Julio y agosto son meses ideales para hacer esquejes semileñosos de lagerstroemias, adelfas, fucsias, hortensias, madreselvas, geranios, y de las espíreas que florecieron en primavera. Escoge las ramas más vigorosas, dales un corte limpio, unta el extremo con hormonas de arraigo y plántalas enseguida.

Recorta las aromáticas

Poda las espigas de flores viejas de las aromáticas y tres a cuatro centímetros del último crecimiento para que sigan floreciendo. Con las espigas secas aprovecha para hacer saquitos perfumados.

Haz un alcorque a los árboles

Cavar un alcorque en torno al tronco de los árboles hará que aprovechen mejor la lluvia y el riego. Vigila que no se llene de malas hierbas; para ello, lo mejor es acolcharlo con corteza de pino o algún árido. Antes de irte de vacaciones riégalos bien; haz lo mismo con los arbustos que hayas plantado este año.

 

Plantas de flor

Protégelas del golpe de calor

Como herbáceas que son, están más expuestas al golpe de calor, de efectos letales. Por ello, en estos días tan calientes no descuides el riego.

Controla la polilla del geranio

Geranios, gitanillas y demás pelargonios sufren en esta época la amenaza de la oruga de la polilla del geranio (Cacyreus marshalli). El insecto pone los huevos en las corolas y las larvas devoran el corazón de los tallos, causando la muerte de las plantas. Para prevenir sus daños, actúa de forma preventiva o en los primeros estadios larvarios. Puedes usar insecticidas biológicos basados en el extracto de neem o las esporas y toxinas del Bacillus thuringiensis‘Kurstaki’ o

Elimina las flores viejas

Si quieres alargar la floración de las vivaces y anuales, pínzalas a medida que vayan muriendo las flores.

Entutora dalias, gladiolos…

Las plantas altas y de tallos delgados que sostienen grandes flores, como las dalias, peonías, gladiolos, azucenas, cañas de las Indias, e incluso las margaritas, necesitan que les coloques tutores.

Previene el golpe de calor

Defiende a tus plantas de flor (recuerda que son herbáceas) del efecto de las altas temperaturas asegurándoles la provisión de agua necesaria. Solo así serán capaces de resistir una brusca subida del termómetro.

Plantas de interior

Asegúrales una buena hidratación

Un fin de semana de verano sin agua suficiente puede dejarte sin tus plantas de interior. Si te ausentas, asegúrales la necesaria hidratación. No todas precisan la misma cantidad de agua, pero en general evita el exceso de riego y sobre todo el encharcamiento, que propicia la aparición de patógenos. Agrúpalas para generar un microclima más húmedo, y no dejes de pulverizarlas con agua destilada o descalcificada al menos un par de veces al día. Si sales de vacaciones lee nuestras recomendaciones en la agenda de agosto.

Impide que las ataque la araña roja

Si el follaje está bien humectado mantendrás a raya a la araña roja, un ácaro que medra gracias al calor y la sequedad ambiental. Sabrás que ha atacado cuando las hojas comiencen a perder color y secarse; en el envés podrás observar unas finísimas telas con las minúsculas arañas. Rocíalas con agua; si no se van, aplica un acaricida.

Deja de abonarlas

En julio y agosto suspende los aportes de fertilizante a tus plantas de interior; deberás reiniciarlos en septiembre.

 

Huerto

Tiempo de cosecha

Ya empieza a haber melocotones, albaricoques y ciruelas maduros en los árboles, y melones, sandías, judías verdes, patatas tardías, cebollas, nabos, zanahorias, lechugas, tomates, calabacines y pepinos en el huerto… Si has aplicado productos fitosanitarios respeta el periodo de seguridad antes de consumir los frutos y hortalizas.

No te olvides de entutorar las tomateras y pimenteras.

Cespéd

Defiende el césped del calor

Si tienes un césped clásico, pasa el cortacésped con menor frecuencia y deja la hierba más alta para evitar que amarillee. Vigila que no le falte riego, y  si no hiciera tanto calor conviene actuar como en junio.

Antes de salir de vacaciones

Siega el césped antes de ausentarte, pero dejando dos tercios de la altura: así aguantará mejor el efecto del sol durante un par de semanas. Pásale el rodillo de púas o escarificador para que absorba bien el agua, y revisa el sistema de riego y los aspersores.

Fuente: Verde es vida . www.verdeesvida.es