Jardín de invierno

Plantas de interior: jardines de invierno

¿Un porche o un patio convertidos en un invernadero? ¿O un invernadero amueblado donde pasar buenos ratos entre el verde y las flores? Esto es un jardín de invierno, un espacio con grandes cristaleras para que las plantas reciban buena luz, pero confortable para hacer vida en botánica compañía durante los meses más fríos del año. ¿Exceso de sol español? Nada que un toldo o un estor no puedan remediar.
Imagínate desayunando una mañana de sol de otoño entre tu magnífica colección de plantas de interior. Escuchando música, leyendo o escribiendo entre tiestos de begonias, palmeras, helechos, ciclámenes, orquídeas en flor… disfrutando de la luz de la mañana pero al abrigo del frío exterior. En el norte de Europa y EEUU, donde la luz solar es tan apreciada, llaman a estos espacios winter garden —jardín de invierno—, garden room —habitación-jardín—, sunroom —habitación solar—, o conservatory,un término que es tanto sinónimo de invernadero como de porche con techo acristalado.
Estas grandes ‘cajas de cristal’ prolongan la casa hacia el exterior con todas las ventajas de un confortable interior, pero además permiten dar rienda suelta al entusiasmo jardinero todo el año.
Estas grandes cajas de cristal prolongan la casa hacia el exterior con todas las ventajas de un confortable interior, pero además permiten dar rienda suelta al entusiasmo jardinero todo el año. Los espacios de este tipo son también habituales en el norte de España, sin olvidar los tradicionales miradores, cuyos amplios ventanales orientados al mediodía dejan entrar la luz en abundancia, condición necesaria para cultivar plantas en un interior.
Crear un jardín de invierno
• Luz: Para crear un espacio verde donde hacer vida dentro de casa es imprescindible disponer al menos de una gran cristalera que deje entrar la luz en la cantidad, y con la calidad, que requieren las plantas. Las orientaciones sur o levante son las más convenientes porque permiten que entre el suave sol de la mañana y el mediodía, y de paso aseguran la posibilidad de disfrutar del ambiente durante todo el año. Una orientación poniente puede resultar sofocante por las tardes, sobre todo en los días más calientes, y fría en invierno.
• Cerramientos: Las tecnologías para cerramientos en aluminio, madera y cristal disponibles hoy en día permiten acristalar fácilmente los laterales y el techo de un porche o un patio. Cuando llega el buen tiempo, las hojas de las ventanas y puertas pueden deslizarse o plegarse totalmente en un extremo mediante un sistema de rieles para dejar totalmente abierto el vano. Así, estas verdaderas prolongaciones de la casa llenas de naturaleza y vida pueden ser todo lo grandes y arquitectónicas que se desee. Hay quien alberga en su jardín de invierno un comedor, un salón con todas las comodidades, e incluso un spa.
• Agua para el riego: Asegurar la provisión de agua necesaria para que vivan las plantas exige contar una toma dentro de la habitación, ya sea para regarlas a mano con regadera, ya sea para acoplar un sistema de riego automático por goteo o microaspersión, la manera más cómoda y eficaz de cumplir con esta tarea sobre todo cuando los ejemplares son numerosos. Los tiestos de autorriego proporcionan también una buena solución.
• Humedad ambiental: Tradicionalmente se han utilizado fuentes borboteantes para asegurar a las plantas la humedad ambiental que les resulta tan beneficiosa, especialmente a las que son de origen tropical. Los diseños de fuentes abarcan actualmente todos los estilos y materiales, tal como podrás comprobar en tu centro de jardinería. Los nebulizadores y humidificadores son también muy eficaces, pero sin el encanto de las fuentes.
• La selección de plantas: Hay jardines de invierno lo suficientemente grandes y amplios para albergar ejemplares botánicos de gran tamaño, ya sean palmeras, árboles como los distintos tipos de ficus, incluidos los gomeros, coníferas como el pino de Norfolk, arbustos y trepadoras como los jazmines típicos de climas cálidos… Pásate por la sección de plantas de interior de tu centro de jardinería y te sorprenderá la gran cantidad de especies que puedes cultivar en un jardín de invierno. Si tienes dudas respecto a alguna planta que te haga especial ilusión solo tienes que consultar sobre su viabilidad a uno de sus expertos. Recuerda que muchas de estas plantas ejercen un efecto purificador en el aire.